David Silva, España
Foto: Getty Images
España tiene ante sí la oportunidad de sellar su clasificación a la Euro 2016 con un triunfo como local ante un frágil Luxemburgo en partido del grupo C
La selección española quiere certificar su clasificación
matemática para la defensa de las dos coronas consecutivas en la
Eurocopa 2016, a falta de un punto en dos jornadas, con Luxemburgo como
primera opción en Las Gaunas, donde se quiere calmar el clima de
hostilidad desatado contra Gerard Piqué.
Consulta el calendario y los resultados de la Eliminatoria de la Eurocopa 2016 AQUÍ.
El fútbol ha pasado a un segundo plano en los dos últimos encuentros de local de España. En León se inició un rechazo a la figura de Piqué que no ha tenido freno. Los silbidos le acompañaron desde su llegada, en el entrenamiento de la víspera y durante un amistoso ante Costa Rica.
La Federación y el equipo lo tomó como un hecho puntual y aislado en una ciudad donde podría haber animadversión al trasladar el eterno enfrentamiento Barcelona contra Real Madrid. Pero la situación se repitió en un día decisivo, en Oviedo, en el partido que decidía el liderato de grupo ante Eslovaquia. España vengaba la derrota desde la que ha encadenado seis triunfos consecutivos y en la grada se volvían a escuchar silbidos contra Piqué.
Ahora, con la clasificación en el bolsillo a falta de un punto a sumar ante Luxemburgo y el partido final en Kiev contra Ucrania, la visita a La Rioja llega marcada por una campaña a favor del central catalán en las redes sociales. El jugador pide tiempo para recuperar la normalidad, reivindicando siempre su compromiso con España y entendiendo que lo que está ocurriendo es cuestión de moda.
Lo que es seguro es que Vicente del Bosque pondrá a Piqué de titular y jefe de una zaga afectada por las bajas. No estará Sergio Ramos, por su lesión de hombro, ni tampoco Dani Carvajal en el lateral derecho. Provocará que sea la defensa del Barcelona la que inicie el partido con Marc Bartra y Jordi Alba más Juanfran Torres como único jugador de otro club en la zaga.
El equipo titular tipo de Del Bosque tiene, además de la baja de Ramos, las ausencias de Andrés Iniesta, por lesión, y Diego Costa, por sanción. El delantero no se podrá reencontrara ante el rival contra el que calmó su ansiedad, autor de uno de los cuatro tantos del último precedente, con el que puso punto y final a 514 minutos de sequía goleadora con la Roja.
En la baraja de opciones que maneja Del Bosque, los nombres que toman ventaja para regresar a la selección directos a la titularidad son Thiago Alcántara en el centro del campo y Álvaro Morata en la punta del ataque. Mientras, Cesc Fábregas vivirá un momento especial al convertirse en centenario.
El historial de enfrentamientos muestra la diferencia abismal entre España y Luxemburgo, selección que ha sido incapaz de marcar un solo tanto a la Roja en cinco partidos disputados. Pleno de triunfos españoles con once goles a favor y ninguno en contra plasman dos realidades distintas.
Situada en el puesto 142 del ránking FIFA, Luxemburgo vive instalada lejos del milagro de 'colarse' en la fase final de un gran evento desde 1963, cuando llegó a forzar un partido de desempate con Dinamarca para decidir un puesto final en la Eurocopa. El presente lo marca su lucha por conseguir alguna victoria en su grupo y lo ha conseguido en cada uno de sus cuatro últimas fases de clasificación.
La última es reciente, el pasado 5 de septiembre, cuando sorprendió a Macedonia en un partido que pudo perder a seis minutos del final, pero el portero Jonathan Joubert detuvo un penalti, y que acabó ganando en el tiempo añadido gracias al tanto del debutante Sébastien Thill. Su triunfo intercambió la deshonrosa posición de colista de grupo.
Saldrá a defenderse en Las Gaunas y buscar algún contragolpe que pueda hacer daño a España. Con una baja importante en defensa, la de Chris Philipps por sanción, y la duda del seleccionador Luc Holtz en dar continuidad de inicio al autor de la única victoria, el joven Thill o mantener a Aurelien Joachim, habitual titular en sus onces.
En caso de milagro, Luxemburgo ya no podrá acabar más alto que el cuarto puesto, posición por la que lucha con Bielorrusia ante la que perdió en su último encuentro disputado. Lo tiene difícil, no sólo porque ha perdido en sus seis últimas salidas, sino viendo que España lleva 31 partidos de la fase de clasificación sin perder de local, con 16 victorias consecutivas desde que cayese ante Grecia (0-1) el 7 de junio de 2003.
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El fútbol ha pasado a un segundo plano en los dos últimos encuentros de local de España. En León se inició un rechazo a la figura de Piqué que no ha tenido freno. Los silbidos le acompañaron desde su llegada, en el entrenamiento de la víspera y durante un amistoso ante Costa Rica.
La Federación y el equipo lo tomó como un hecho puntual y aislado en una ciudad donde podría haber animadversión al trasladar el eterno enfrentamiento Barcelona contra Real Madrid. Pero la situación se repitió en un día decisivo, en Oviedo, en el partido que decidía el liderato de grupo ante Eslovaquia. España vengaba la derrota desde la que ha encadenado seis triunfos consecutivos y en la grada se volvían a escuchar silbidos contra Piqué.
Ahora, con la clasificación en el bolsillo a falta de un punto a sumar ante Luxemburgo y el partido final en Kiev contra Ucrania, la visita a La Rioja llega marcada por una campaña a favor del central catalán en las redes sociales. El jugador pide tiempo para recuperar la normalidad, reivindicando siempre su compromiso con España y entendiendo que lo que está ocurriendo es cuestión de moda.
Lo que es seguro es que Vicente del Bosque pondrá a Piqué de titular y jefe de una zaga afectada por las bajas. No estará Sergio Ramos, por su lesión de hombro, ni tampoco Dani Carvajal en el lateral derecho. Provocará que sea la defensa del Barcelona la que inicie el partido con Marc Bartra y Jordi Alba más Juanfran Torres como único jugador de otro club en la zaga.
El equipo titular tipo de Del Bosque tiene, además de la baja de Ramos, las ausencias de Andrés Iniesta, por lesión, y Diego Costa, por sanción. El delantero no se podrá reencontrara ante el rival contra el que calmó su ansiedad, autor de uno de los cuatro tantos del último precedente, con el que puso punto y final a 514 minutos de sequía goleadora con la Roja.
En la baraja de opciones que maneja Del Bosque, los nombres que toman ventaja para regresar a la selección directos a la titularidad son Thiago Alcántara en el centro del campo y Álvaro Morata en la punta del ataque. Mientras, Cesc Fábregas vivirá un momento especial al convertirse en centenario.
El historial de enfrentamientos muestra la diferencia abismal entre España y Luxemburgo, selección que ha sido incapaz de marcar un solo tanto a la Roja en cinco partidos disputados. Pleno de triunfos españoles con once goles a favor y ninguno en contra plasman dos realidades distintas.
Situada en el puesto 142 del ránking FIFA, Luxemburgo vive instalada lejos del milagro de 'colarse' en la fase final de un gran evento desde 1963, cuando llegó a forzar un partido de desempate con Dinamarca para decidir un puesto final en la Eurocopa. El presente lo marca su lucha por conseguir alguna victoria en su grupo y lo ha conseguido en cada uno de sus cuatro últimas fases de clasificación.
La última es reciente, el pasado 5 de septiembre, cuando sorprendió a Macedonia en un partido que pudo perder a seis minutos del final, pero el portero Jonathan Joubert detuvo un penalti, y que acabó ganando en el tiempo añadido gracias al tanto del debutante Sébastien Thill. Su triunfo intercambió la deshonrosa posición de colista de grupo.
Saldrá a defenderse en Las Gaunas y buscar algún contragolpe que pueda hacer daño a España. Con una baja importante en defensa, la de Chris Philipps por sanción, y la duda del seleccionador Luc Holtz en dar continuidad de inicio al autor de la única victoria, el joven Thill o mantener a Aurelien Joachim, habitual titular en sus onces.
En caso de milagro, Luxemburgo ya no podrá acabar más alto que el cuarto puesto, posición por la que lucha con Bielorrusia ante la que perdió en su último encuentro disputado. Lo tiene difícil, no sólo porque ha perdido en sus seis últimas salidas, sino viendo que España lleva 31 partidos de la fase de clasificación sin perder de local, con 16 victorias consecutivas desde que cayese ante Grecia (0-1) el 7 de junio de 2003.
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