El Director Técnico de Brasil, Luiz Felipe Scolari, fue abucheado en el estadio Mané Garrincha de Brasilia, al igual que los delanteros Fred y Hulk, mientras que el zaguero David Luiz fue muy aplaudido, antes del partido por el tercer puesto contra Holanda.
La imagen de Felipao fue mostrada en la pantalla gigante del estadio de la capital brasileña, a minutos del encuentro para definir el tercer lugar en la Copa del Mundo.
En ese momento, los aficionados, que comenzaban a llegar al estadio, empezaron a abuchear al seleccionador brasileño.
Lo mismo pasó con los delanteros Fred y Hulk, de pobre desempeño en la Copa. Cuando las pantallas mostraron a ambos descendiendo del bus que los trajo al Mané Garrincha, se desató una ensordecedora silbatina.
No obstante, cuando fue el turno de David Luiz de descender del bus, la 'torcida' comenzó a vitorear al defensa, el mismo que rompió en llanto al final de caer derrotados 7-1 ante Alemania en semifinales.
Los hinchas brasileños están indignados con el desempeño de su equipo, sobre todo con los atacantes, que casi ni aparecieron en los partidos. No obstante, siguen amando al astro Neymar, quien cayó lesionado en cuartos de final y se perdió el resto de los juegos.
Incluso desde el gobierno, la presidenta Dilma Rousseff ha solicitado cambios en el futbol brasileño.
Pese al desánimo, los brasileños llegan al estado vistiendo sus camisetas con el 10 y el Neymar JR estampado en la espalda, además de banderas de su país.
La imagen de Felipao fue mostrada en la pantalla gigante del estadio de la capital brasileña, a minutos del encuentro para definir el tercer lugar en la Copa del Mundo.
En ese momento, los aficionados, que comenzaban a llegar al estadio, empezaron a abuchear al seleccionador brasileño.
Lo mismo pasó con los delanteros Fred y Hulk, de pobre desempeño en la Copa. Cuando las pantallas mostraron a ambos descendiendo del bus que los trajo al Mané Garrincha, se desató una ensordecedora silbatina.
No obstante, cuando fue el turno de David Luiz de descender del bus, la 'torcida' comenzó a vitorear al defensa, el mismo que rompió en llanto al final de caer derrotados 7-1 ante Alemania en semifinales.
Los hinchas brasileños están indignados con el desempeño de su equipo, sobre todo con los atacantes, que casi ni aparecieron en los partidos. No obstante, siguen amando al astro Neymar, quien cayó lesionado en cuartos de final y se perdió el resto de los juegos.
Incluso desde el gobierno, la presidenta Dilma Rousseff ha solicitado cambios en el futbol brasileño.
Pese al desánimo, los brasileños llegan al estado vistiendo sus camisetas con el 10 y el Neymar JR estampado en la espalda, además de banderas de su país.