BARCELONA -- Ángel Di María, mediapunta, centrocampista, extremo o lo que se precise, es el último crack que ha aparecido en el entorno del FC Barcelona, como objetivo del club para reforzar su plantilla. El diario Sport apuntó este miércoles su nombre aseverando que el jugador del Manchester United es una petición expresa de Luis Enrique, quien quiere sumar desborde al equipo la próxima temporada.
En cualquier caso, se entiende, en la segunda mitad de la próxima temporada, por cuanto la sanción de la FIFA no permite inscribir al Barça jugadores hasta enero de 2016 y habría que ver si Di María se sumaría a Vidal, entrenando pero sin jugar estos próximos meses, o sería cedido a otro club en el primer tramo de la temporada, siempre que no disputase la Champions, evidentemente.
Que Di María quiere abandonar el Manchester United no es un secreto y desde la primavera se han sucedido los rumores acerca de su traspaso. El argentino tuvo un impacto muy destacado al comienzo del último curso con los Diablos Rojos, que lo incorporaron en agosto de 2014 proveniente del Real Madrid. Van Gaal se mostró encantado con su rendimiento (destacable dentro de la mediocridad de resultados del equipo) y la hinchada de Old Trafford se entregó a él... Hasta que llegó el frío invierno.
“Hay jugadores a los que el invierno les cae como una roca sobre la cabeza. El verano es muy agradable y la primera parte del otoño también, pero cuando llega el frío y a las cinco de la tarde ya es de noche, con todo cerrado… No todos se acostumbran y Ángel no debió hacerlo” apunta desde Brighton Brian Owen, periodista del diario local y para quien “es muy distinto vivir en Manchester a hacerlo en Londres”.
El ataque que sufrió su domicilio en enero fue la gota que colmó el vaso. Di María cenaba en casa junto a su familia cuando sonaron las alarmas al intentar un grupo de ladrones asaltar su lujoso chalet. No pasó nada porque los delincuentes se marcharon a la carrera y sin botín, pero desde aquel día la mujer del ‘Fideo’ decidió mudarse a un hotel. Y en el jugador comenzó a instalarse la idea de marcharse de Inglaterra.
PRETENDIENTES Y ELECCIONES
El exterior argentino ha sido relacionado indistintamente con el París Saint-Germain, el Bayern Múnich e incluso el Milan, que de alguna manera estarían dispuestos a negociar su fichaje con el Manchester United, que en el verano de 2014 le convirtió en el futbolista más caro de su historia al pagar 75 millones de euros al Real Madrid.
El precio, claro, se contempló siempre un freno, por mucho que el entorno de Di María deslizara a la opinión pública que el futbolista estaría dispuesto a rebajarse su salario (se afirma que es de 10 millones de euros en Old Trafford) para facilitar su incorporación a un club de fuera de Inglaterra.
La aparición del FC Barcelona en el asunto sorprendió este miércoles en el entorno del Camp Nou. De acuerdo a lo publicado por el diario Sport, Di María sería un nombre más interesante en los esquemas de Luis Enrique que Paul Pogba a corto plazo, tanto teniendo en cuenta que el francés llegaría al club azulgrana al acabar la próxima temporada como atendiendo a que el argentino estaría a disposición del entrenador a partir del uno de enero de 2016.
En todo ello, claro, el tema electoral acude al primer plano, sospechándose por un lado que el entorno del propio Di María haya podido deslizar la noticia como, por otro, que desde el equipo electoral de Bartomeu, con el conocimiento del jugador, se haya filtrado este interés, en lo que sería visto como un golpe de efecto en la campaña a la presidencia del Barcelona.
Sea como fuere, la incorporación del exterior argentino se entendería de primer nivel en el club, por cuanto le ‘regalaría’ a Luis Enrique ese jugador con desborde que habría solicitado el entrenador asturiano, sumándose a Messi y Neymar en esta cualidad especial.
“En estas elecciones se discutirán modelos de gestión y de club porque la sanción de la FIFA evitará que ningún aspirante a la presidencia juegue la baza de los fichajes”.
La frase, dicha por el entorno del presidente saliente y repetida machaconamente en mayo y principios de junio, se ha demostrado falsa. De una u otra manera Pogba se mantiene en un escenario en el que van apareciendo distintos nombres de jugadores que no se ligan a ningún candidato y sin atender sanciones de ningún tipo de la FIFA.
La información pone énfasis en dos temas que no son menores: el jugador volvería sin dudarlo a la Liga española y le encantaría fichar por el Barcelona a pesar de su pasado madridista y, también, los contactos entre el club azulgrana, su entorno y representantes ligados al Manchester United comenzaron hace varias semanas, lo que da a entender que habría sido bajo el mandato, todavía, de Bartomeu que el Barça llamó a su puerta.
“A cada uno o dos días que pasen en la campaña saltará una bomba. Unas veces desde una candidatura directamente, otras desde un ‘entorno’ próximo” indicó un observador de los comicios en Barcelona.
El protagonista fue esta vez Ángel di María, quien se apuntaría por delante del mismísimo Pogba, cuyo fichaje sigue considerándose trascendental e innegociable de cara al futuro, pero que se entiende que si es ganado a la causa azulgrana, sea quien sea el vencedor en las elecciones, no llegaría al Camp Nou hasta julio de 2016. Y el argentino, como Aleix Vidal, entraría antes en juego.
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