Mandzukic firmaría un contrato con la Vecchia Signora por las próximas cuatro temporadas, hasta junio de 2019, y cobraría cerca de cuatro millones de euros por temporada, una cantidad muy superior a la que percibía en el Atlético de Madrid.
Ante la inminente salida de Carlos Tévez a Boca Juniors y, según se especula, la de Fernando Llorente, Mandzukic llegaría al club italiano como delantero de garantías para competir por el puesto con Álvaro Morata, quien ha causado una grata impresión tras una temporada en el club.
La salida de Mandzukic del Atlético de Madrid se veía venir incluso antes de que terminara la campaña.
El croata, quien llegó a la ribera del Manzanares procedente del Bayern Munich por 22 millones de euros, cuatro más de lo que la Juve habría pagado por él, no ha cumplido con las expectativas del club y, en particular, con las de su técnico Diego Pablo Simeone.
De afamado carácter difícil, algo que ya le había costado el puesto en el Bayern Munich de Pep Guardiola, Mandzukic nunca encontró su lugar en el vestidor rojiblanco, donde los compañeros le tenían un gran respeto, incluso admiración, a su “impresionante profesionalidad”, pero nunca lograron acostumbrarse a sus maneras y llegó a tener algún desencuentro con los líderes del conjunto.
Mucho menos se acostumbró Simeone, que mantenía una tirante relación con el croata. Para empezar, no le gustaba que no se esforzara por comunicarse en español. Y si bien el técnico nunca lo admitió abiertamente, se encargó de recordarlo cada vez que habló del jugador en rueda de prensa, eso sí, para defenderlo cuando empezaron a surgir las dudas en torno a su estado de forma.
El entrenador aludió una dolencia “en el tobillo”, aunque siempre se encargó de dejar claro que el jugador le comunicó su estado físico “a través de un traductor”.
Simeone, al igual que sus jugadores, siempre destacó la actitud de profesionalismo del croata; era simplemente su personalidad lo que no cuadraba.
Aunado a ello llegó la sequía goleadora que se extendió durante tres meses en la recta final de la campaña. La última vez que Mandzukic marcó con el Atlético de Madrid fue el 21 de febrero, en la victoria 3-0 sobre el Almería. A raíz de entonces, el croata perdió protagonismo, luego de perderse un partido por acumulación de tarjetas y otro por lesión, quedó fuera por decisión técnica en cuatro de los últimos 10 partidos de Liga.
En total, Mandzukic sumó 20 tantos y cinco asistencias en los 43 encuentros que disputó con la camiseta rojiblanca. Y aunque culminó la campaña como máximo goleador del equipo, la cifra resultó muy inferior a los 36 tantos de Diego Costa y los 34 goles de Radamel Falcao en las dos campañas anteriores.
Miranda, el siguiente
A la salida de Mario Mandzukic seguirá, casi de inmediato, la del central brasileño Joao Miranda, quien según Sky Italia, ha llegado a un acuerdo con el Inter de Milán, que pagará 15 millones de euros por el traspaso.
Con la baja de Miranda, el Atléticvo de Madrid libera una plaza extracomunitaria, misma que, en principio, ocupará el argentino Ángel Correa, en caso de que la cesión del mexicano Raúl Jiménez, ya sea al Porto o al Benfica, no se concrete.
Se antoja difícil, pues el delantero de 23 años necesita tiempo para adaptarse al futbol europeo, por mucho que a Simeone le atraiga su tesón.
Por su parte, el Atlético necesita un delantero que asegure una cuota de, al menos, 30 tantos por campaña y un arrastre mediático que se equipare al del croata para hacer frente a los tres torneos grandes la próxima temporada.
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