Toluca, Estado de México -
Cuando el Estadio Nemesio Diez estaba volcado en ovaciones para Antonio Naelson Sinha, un par de rivales brasileños se volvieron los villanos de la fiesta escarlata.
Entre Camilo Sanvezzo y Tiago Volpi dejaron la pizarra 1-2 a favor de Gallos en el último juego de fase regular de Sinha en casa.
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Los Diablos Rojos del Toluca dejaron ir la oportunidad de tomar la punta del liderato en el último juego en casa, donde opciones no le faltaron para llevarse más goles.
En cambio, los Gallos encontraron en la paciencia y en una genialidad de Sanvezzo los argumentos para sumar tres puntos que sirven para soñar con clasificar aunque las posibilidades sean remotas.
A los 39 minutos, Jesús Méndez tomó el esférico por la banda derecha y mandó un centro preciso para Fernando Uribe, quien superó en la marca al juvenil Jaime Gómez para anotar el 1-0.
De ahí en adelante los escarlatas se apropiaron del duelo al grado de que Tiago Volpi tuvo que lucir con una atajada espectacular tras un remate de Uribe en el área, tras controlar el balón con el pecho.
Como todo iba encaminado al triunfo, Hernán Cristante decidió darle minutos a Sinha, quien entró de cambio por Antonio Ríos en el segundo tiempo.
Al ritmo de “no se va, no se va, Sinha no se va”, el brasileño comenzó a tocar el balón en su último juego en el Nemesio Diez como futbolista profesional, previo a la Liguilla.
Sin embargo, el gol de la tranquilidad no llegaba y en un error del propio Sinha, su compatriota Sanvezzo le ganó el balón en media cancha y desde ahí disparó al ángulo para concretar el 1-1 al 60'.
En los últimos minutos llegó una falta sobre Pablo Barrientos en el área. El propio delantero pidió el balón para cobrar el penalti y Sinha se lo concedió. Pero, tras escuchar la petición de la afición, se decidió que mejor fuera el brasileño el cobrador.
Tiago Volpi encaró al experimentado futbolista. Cuando llegó el momento de cobrar, Sinha le pegó sin mucha fuerza al esférico y Volpi adivinó para detener la pena máxima.
Y cuando el duelo agonizaba, apareció de nueva cuenta Sanvezzo para rematar un centro por la banda izquierda de Benítez y mecer las redes en un sorpresivo 1-2 que arruinó la fiesta en el Infierno.
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