Con poco más de una hora y media de anticipación, las Selecciones de México y Holanda arribaron al Estadio Castelao.
El Tricolor lo hizo primero, a las 11:15 horas locales (9:15 de México), escoltado por un par de decenas de motocicletas y patrullas, procedentes del hotel de concentración ubicado a aproximadamente 15 kilómetros.
El Tricolor lo hizo primero, a las 11:15 horas locales (9:15 de México), escoltado por un par de decenas de motocicletas y patrullas, procedentes del hotel de concentración ubicado a aproximadamente 15 kilómetros.
Antes del equipo de Miguel Herrera, quienes también llegaron fuertemente custodiados fueron los árbitros, encabezados por el portugués Pedro Proenca.
El equipo holandés tardó poco en ingresar al túnel que rodea la cancha, a las 11:25 horas, luego de sortear pocos obstáculos debido a que la afluencia de aficionados para este partido ha sido mucho menor en comparación con los tres previos del Tri.
A pesar de ello, en la calle los fanáticos aztecas le pusieron colorido a la llegada de los autobuses, ya que al ver el holandés alzaron los brazos para corear el polémico "¡eeeeh, puto!, mientras que el mexicano fue recibido con el Cielito Lindo.
A pesar de ello, en la calle los fanáticos aztecas le pusieron colorido a la llegada de los autobuses, ya que al ver el holandés alzaron los brazos para corear el polémico "¡eeeeh, puto!, mientras que el mexicano fue recibido con el Cielito Lindo.
