Como una especie de persignación antes de iniciar el proceso, Miguel Herrera le dio todo el peso del futuro a los resultados.
Después de dos ciclos mundialistas convertidos en carrusel de entrenadores, el “Piojo” dijo deberse primero a la FMF y luego a la afición, además de que garantizó que estará en Rusia 2018, para lo cual el primer amistoso del camino será este sábado contra Chile.
“Nosotros vamos a trabajar para dar resultados y que los resultados manden y tengan tranquila a la gente que por supuesto es la que nos tiene aquí, a la Federación (Mexicana de Futbol)”, explicó.
“Y después a nuestro público. Y si tenemos contentos a ellos, obviamente seguiremos”.
El “Piojo” ofreció una conferencia de prensa en el nuevo estadio de los 49’s de San Francisco, donde minutos antes su equipo reconoció la cancha con un entrenamiento en el que definió a su alineación.
Tras la práctica, dijo que no le preocupan las críticas que continuamente recibe el timonel del Tricolor por parte de estrategas de clubes inconformes con los métodos de trabajo. Por ello, aclaró que siempre buscarán el acercamiento con los equipos para trabajar de la mano.
Ricardo La Volpe fue el último timonel en cumplir un cuatrienio al frente del Tri, ya que tras Alemania 2006 y Sudáfrica 2010 ni Hugo Sánchez como tampoco José Manuel de la Torre lo consiguieron.
“Tengo un buen grupo de jugadores, una cantidad importante, y que se cumpla el ciclo es dando resultados, es la única forma que garantices cumplir tu ciclo hasta Rusia y estoy seguro que nosotros lo vamos a dar”, manifestó.
“Cada vez más hay más jugadores que van a Europa y no solamente eso, sino que están jugando más minutos”.
Sobre el partido ante los andinos, aseguró que ganar se convirtió en una obligación para este equipo.
“El objetivo es ver bien al equipo, por supuesto jugar bien, que el equipo se vea dinámico, bien posicionado en la cancha y ganar. En la Selección se ha vuelto una obligación ganar”, añadió.
Además aseguró que la cancha está en buen estado y que Chile es un buen parámetro, similar a los que hubo antes del Mundial, como Nigeria, Serbia o Portugal, más allá de los rivales que a veces lucen con menos cartel.
